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Seguro que si ya has oído hablar de Marie Kondo, lo primero que se te venga a la cabeza sea el concepto de orden. Y también, por qué no, el de minimalismo. KonMari, el minucioso mecanismo ideado por la reina del orden japonesa la llevó a alcanzar el éxito gracias a varios libros y una serie en Netflix.
¿Qué podemos aprender del método KonMari? Aparte de a ser más organizados y ser más felices con menos, podemos aplicarlo a nuestras finanzas personales. Poner orden dentro de nuestros ahorros, cambiar hábitos y cuidar nuestras finanzas nos puede ayudar a vivir más desahogados y a deshacernos de aquello que no nos suma ni nos aporta. Si quieres saber cómo, ¡sigue leyendo!
El método Marie Kondo: el orden facilita el ahorro
Marie Kondo habló de su método KonMari en su primer libro educacional, “La magia del orden”, un best seller que plasmaba el revolucionario sistema para mantener las pertenencias ordenadas de manera definitiva.
Uno de sus ‘mandamientos’ es simple: solo debemos conservar aquello que nos produce alegría, felicidad o satisfacción. Con los objetos materiales, como por ejemplo la ropa, es sencillo. Marie Kondo propone que coloques todas tus prendas una a una sobre la cama u otras superficies. Solo así serás realmente consciente de todo lo que posees y podrás plantearte qué prendas realmente te hacen feliz o, por otra parte, necesitas. A partir de ahí, podrás eliminar aquello que no te aporta y tener el espacio necesario para establecer un orden real y duradero.
Pero, ¿cómo podemos aplicar esta regla a nuestras finanzas? Es decir, ¿Cómo podemos ordenar nuestra economía? Lo cierto es que el método KonMari puede aplicarse a todos los ámbitos de la vida, no solo al material. Se trata de un ejercicio de reflexión y de atención hacia aspectos que damos por sentados o que no solemos plantearnos. La idea detrás de todo este concepto es que deberíamos sentirnos felices y agradecidos por lo que tenemos en nuestra vida, no agobiados.
Como ejemplo de felicidad o satisfacción en un gasto podría ser la mensualidad a una actividad física. El esfuerzo económico que supone pagar mes a mes vale la pena si piensas en todo lo bueno que te trae y si realmente lo aprovechas. Sentirte bien física y mentalmente, tener un mejor aspecto y aumentar tu autoestima, descargar tensiones del día a día… Puedes sentir agradecimiento hacia esa cantidad mensual que te permite aumentar tu bienestar.
El paso a paso: felicidad después del orden
Pero vayamos al grano, ¿cómo aplico el Konmari a mis finanzas? Vamos a ver el paso a paso de este sistema, su utilidad en la economía doméstica y cómo podrás sentir felicidad después del orden.
Análisis previo de nuestras finanzas
La fase cero siempre es la evaluación. Haz un análisis detallado de todos tus gastos, ahorros e ingresos mensuales. Incluiremos gastos fijos como mensualidades, facturas, seguros, hipoteca o alquiler, y gastos variables como la compra, los imprevistos, actividades de ocio, comidas… Verlo todo plasmado sobre papel o en un documento te permitirá tener una visión global.
¿Realmente lo necesito?
Es la siguiente pregunta que debes hacerte. ¿Es necesario o prioritario? Así podrás catalogar cada uno de tus gastos por orden de importancia.
Cuando tengas la lista, detente en cada uno de los gastos y pregúntate algo: ¿Es un gasto necesario? ¿Me trae felicidad o bienestar? ¿Me lo puedo permitir? ¿Lo aprovecho? Si la respuesta es no o es dudosa, deberíamos tratar de eliminar ese gasto. Solo así podremos desechar los gastos innecesarios y centrarnos en lo realmente importante: la mejor manera para tener una salud financiera de hierro.
Simplifica tus gastos: la magia del orden
Al hilo del anterior punto, y siguiendo con la filosofía Marie Kondo, te animamos a aplicar el minimalismo también a tus finanzas. Elimina esos gastos innecesarios que solo te aportan alegría momentánea: antojos, caprichos, compras compulsivas…
Por otra parte, la magia del orden también nos ayudará a ahorrar. Tener nuestras finanzas y ahorros ordenados nos facilitará mucho la vida. El ahorro nos permite vivir más desahogados y tomar decisiones más acertadas. Se trata de incluir este hábito en nuestro día a día como un gasto fijo mensual, no como la reserva de aquello que nos sobra al acabar el mes.
Recapitulando
Orden, austeridad y minimalismo: conceptos clave de la cultura japonesa y también del método de Marie Kondo sobre el orden. No en vano, los japoneses son autores de uno de los métodos de ahorro más famosos del mundo: el Kabebo. Marie Kondo sostiene que debemos apreciar todo lo que poseemos y solo gastar dinero en aquello que nos vaya a hacer realmente felices o que vaya a satisfacer alguna necesidad.
Si somos capaces de ordenar nuestras finanzas (nos ayudará mucho coger papel y boli para verlo todo plasmado en papel), podremos planificar nuestros gastos fijos e imprevistos y tener una mejor relación con el ahorro. Es decir, comenzar a verlo como un hábito necesario y positivo, y no como una obligación tediosa. Además, tener esta visión global también nos permitirá tomar buenas decisiones financieras.
