Tabla de contenidos
En 2025 las pensiones contributivas han experimentado un incremento significativo gracias a la revalorización aprobada por el gobierno. El 2,8% de revalorización afecta a las pensiones del sistema de Seguridad Social, mientras que las pensiones mínimas han subido un 6%. Además, las pensiones no contributivas y el Ingreso Mínimo Vital han visto un aumento de hasta un 9%, lo que se traduce en una subida total del 15,4% en dos años.
Esta revalorización forma parte del desarrollo normativo del Real Decreto-ley 9/2024, que tiene como objetivo mejorar la capacidad adquisitiva de los pensionistas en un contexto de alta inflación.
Además de la revalorización, en 2025 se implementará la nueva edad de jubilación: la edad mínima de jubilación se incrementará gradualmente hasta llegar a los 67 años a partir de 2027, lo que representa un cambio importante en las de pensiones en España.
Vive tu jubilación con tranquilidad y planifica tus ahorros con Generación +
¿Qué es una pensión contributiva?
Una pensión contributiva es aquella que se concede por trabajar y cotizar al sistema de Seguridad Social durante su vida laboral. Estas pensiones tienen como objetivo asegurar un nivel de ingresos en la jubilación a las personas que han contribuido con sus aportaciones al sistema. Las pensiones contributivas pueden incluir la pensión de jubilación, la pensión de incapacidad permanente o la pensión de viudedad, entre otras.
A diferencia de otras ayudas, como las pensiones no contributivas, las pensiones contributivas dependen de las cotizaciones realizadas a lo largo de la vida laboral del solicitante. Por lo tanto, cuanto más tiempo se haya cotizado y mayor haya sido la base de cotización, mayor será la pensión contributiva que se reciba.
Requisitos para acceder a una pensión contributiva en 2025
Cada año existen variaciones en las condiciones para poder acceder a una pensión contributiva porque desde 2013 se viene ampliando la edad de acceso a la jubilación. Es importante conocer los requisitos y confirmar la información cada año hasta 2027, sobre todo, en lo relacionado con la edad y los años cotizados, que son los factores que más varían de año en año. Hay 3 requisitos clave:
Edad mínima
La edad mínima para acceder a la pensión contributiva de jubilación es de 65 años. Sin embargo, esta edad ha ido aumentando gradualmente debido a las reformas en el sistema de pensiones. A partir de 2027, la edad de jubilación será de 67 años, aunque también existe la posibilidad de jubilarse de forma anticipada, siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos.
Período mínimo de cotización
Otro requisito necesario para acceder a una pensión contributiva es haber cotizado un mínimo de 15 años al sistema de Seguridad Social. De estos 15 años, al menos 2 deben haber sido cotizados en los últimos 15 años anteriores al momento de la jubilación. Cuando más tiempo se haya cotizado, mayor será la pensión contributiva que se recibirá.
Base de cotización
La pensión contributiva también depende de la base de cotización, es decir, del dinero que se ha aportado al sistema de Seguridad Social durante los años trabajados. A mayor base de cotización, mayor será la pensión.
¿Cuáles son las pensiones contributivas?
Las pensiones contributivas están directamente relacionadas con el tiempo trabajado y las cotizaciones realizadas durante la actividad profesional, pero además de las pensiones de jubilación, existen otras causas por las que se puede percibir una pensión contributivas. A continuación, te explicamos los principales tipos de pensiones contributivas que existen en el sistema español:
- Pensión de jubilación
La pensión de jubilación es la más conocida dentro de las pensiones contributivas. Se concede a aquellas personas que han alcanzado la edad de jubilación (que depende del número de años cotizados) y han cumplido con los requisitos de cotización establecidos por la Seguridad Social. La pensión se calcula en función de los años cotizados y de la base de cotización durante la vida laboral.
- Pensión de incapacidad permanente
La pensión de incapacidad permanente se otorga a los trabajadores que sufren una enfermedad o accidente que les impide continuar trabajando. Existen diferentes grados de incapacidad (total, absoluta, gran invalidez), y la pensión varía en función del grado de incapacidad reconocido por los tribunales médicos de la Seguridad Social.
- Pensión de viudedad
La pensión de viudedad es una prestación económica destinada al cónyuge sobreviviente de una persona que fallece y que, en vida, estaba cotizando al sistema de Seguridad Social. El derecho a esta pensión depende de que el fallecido haya cumplido con los requisitos de cotización establecidos para que los beneficiarios puedan acceder a esta ayuda.
- Pensión de orfandad
La pensión de orfandad se concede a los hijos menores de edad o a los mayores de edad que sufran alguna discapacidad y que hayan perdido a uno o ambos progenitores que estuvieran cotizando al sistema de Seguridad Social. La pensión está destinada a cubrir las necesidades económicas básicas de los huérfanos.
- Pensión de favor familiar
La pensión de favor familiar es una pensión que se otorga a los familiares de una persona que fallece sin haber cotizado lo suficiente para acceder a una pensión contributiva por su cuenta, pero que ha aportado al sistema en su vida laboral, en una modalidad especial.
¿Cuánto suben las pensiones contributivas en 2025?
En 2025 las pensiones contributivas experimentarán un incremento del 8,5% respecto al año anterior. Este aumento está en línea con el objetivo de mejorar la capacidad adquisitiva de los pensionistas y de ajustar las pensiones a la inflación.
Este incremento afecta a todas las pensiones contributivas, incluidas las pensiones de jubilación, incapacidad y viudedad, y se aplicará de forma generalizada. El aumento del 8,5% se considera uno de los mayores aumentos de pensiones en los últimos años, debido a la alta tasa de inflación experimentada en los últimos tiempos.
¿Por qué suben las pensiones contributivas?
La subida de las pensiones contributivas en 2025 se debe, en parte, a la actualización automática de las pensiones en función del Índice de Precios al Consumo (IPC). Esta medida está pensada para asegurar que el poder adquisitivo de los pensionistas se mantenga frente a la subida de los precios de los bienes y servicios básicos.
Además, el Gobierno español ha anunciado que continuará con las reformas del sistema de pensiones para adaptarlo a los nuevos desafíos demográficos y económicos, lo que podría generar más cambios en el futuro.
Diferencias entre pensión contributiva y no contributiva
Una de las preguntas más frecuentes es la diferencia entre las pensiones contributivas y las pensiones no contributivas. Ambas son prestaciones económicas, pero se destinan a personas con diferentes circunstancias.
Como hemos explicado, la pensión contributiva depende de las aportaciones realizadas al sistema de Seguridad Social durante la vida laboral. Es decir, se otorgan a aquellas personas que han cotizado a la Seguridad Social durante un determinado número de años.
Por otro lado, la pensión no contributiva está destinada a las personas que no han podido cotizar al sistema de Seguridad Social o que no han cumplido con el número mínimo de años de cotización. Estas pensiones son consideradas una ayuda básica para aquellos que se encuentran en situación de necesidad y no tienen los recursos suficientes para vivir dignamente. Las pensiones no contributivas están gestionadas por los Servicios Sociales y no requieren un período previo de cotización.
Conclusión
Las pensiones contributivas son una de las principales fuentes de ingresos para los jubilados, ya que garantizan una pensión en función de las cotizaciones realizadas a lo largo de la vida laboral. En 2025 las pensiones contributivas experimentaron una subida importante del 8,5%, lo que permitirá mejorar el poder adquisitivo de los pensionistas en un contexto económico desafiante.
Si eres trabajador por cuenta ajena o autónomo, es fundamental que comprendas los requisitos para acceder a una pensión contributiva y que te asegures de cotizar adecuadamente para maximizar tu pensión. En caso de no haber podido cotizar el tiempo necesario, las pensiones no contributivas pueden ser una opción de apoyo económico para quienes se encuentren en situación de vulnerabilidad.
Recuerda que, además de las pensiones contributivas, existen otras alternativas de ahorro para la jubilación que pueden ayudarte a asegurar un futuro económico más estable.