Existen pocas experiencias tan gratificantes y transformadoras como la de formar una familia. Sin embargo, algo tan bonito como tener hijos puede suponer un reto en muchos niveles de nuestra vida: somos totalmente responsables de otra persona que no sabe nada de cómo funciona el mundo que le rodea ni de las personas que viven en él. Criar a un hijo puede ser algo maravilloso, pero también es un desafío financiero que hay que asumir, nuestra situación económica cambia radicalmente a como la conocíamos hasta el momento y debemos estar preparados.
Día sí y día también escuchamos una multitud de noticias sobre la baja tasa de natalidad que hay en España y cómo influye en la media de edad del país, cada vez más envejecido. Desde un punto de vista optimista, son muchas las personas que quieren traer bebés al mundo pero tener un hijo no se paga solo con amor y cariño, hay que hacer cuentas antes de emprender esta aventura tan bonita. Por eso mismo, en este artículo calcularemos cuánto cuesta tener a un hijo: desde pañales hasta educación, te presentamos una tabla de coste que te ayudará a planificar tu futuro financiero de manera efectiva
Si queremos saber una cifra exacta sobre cuánto cuesta tener a un hijo, hay que saber que puede variar significativamente dependiendo de ciertos factores como el estilo de vida, el lugar en el que vivimos, nuestra situación laboral y personal, entre otros. A continuación veremos una breve explicación de los gastos principales que deberemos asumir para poder criar y mantener a nuestros niños.
¿Sabías que tu ahorro también puede ser responsable?
Aunque las visitas al ginecólogo y casi el total de pruebas médicas están cubiertas por la Seguridad Social, existen otro tipo de gastos relacionados con el seguimiento del embarazo que tienen cierto coste. Por ejemplo, en un embarazo sin ningún tipo de problema de salud solo se realizan tres ecografías o visitas al ginecólogo. En el caso, sobre todo, de padres primerizos, se suelen realizar consultas privadas para tener más imágenes del bebé. Para estos casos, los seguros médicos suelen venir de maravilla, ya que permiten escoger el médico que te atenderá, decidir el hospital para el parto y tener visitas mensuales, entre otras prestaciones. Además, la Seguridad Social aún no cubre dos vacunas que son altamente recomendadas (Rotavirus y Meningococo B) y que las familias deberán asumir su coste, así como muchos otros medicamentos que puedan necesitar y no estén suficientemente financiados.
La llegada de un bebé implica la necesidad de comprar cunas, cochecitos, pañales, biberones, ropa y otros artículos esenciales. Estos gastos pueden sumar rápidamente, así que planifica tu presupuesto con anticipación. En ocasiones, tener un hijo también requiere de una mudanza si nuestra vivienda no tiene el suficiente espacio. También habrá que tener en cuenta que ciertos gastos, como el agua, la electricidad o la tasa de basuras, pueden incrementarse al ser uno más en la familia.
Muchos padres se ven obligados a dejar a sus hijos en guarderías si no disponen de ayuda familiar para poder conciliar la crianza con su vida laboral. Estas escuelas infantiles son la gran mayoría privadas y, aunque algunas comunidades autónomas ofrecen subvenciones, el coste sigue siendo bastante elevado. Hay que contar el material escolar, el comedor y otros gastos como el uniforme.
Durante los primeros años influyen decisiones como si optamos por la lactancia materna o por alimentos preparados. Posteriormente notaremos que la lista de la compra es cada vez más grande conforme nuestros hijos van creciendo.
Los niños necesitan jugar y entretenerse y los juguetes son una parte fundamental de su desarrollo. Durante los primeros años quizá sea más fácil mantener los mismos juguetes, pero según van haciéndose más mayores, notaremos cómo cambian sus formas de ocio, por lo que eso podría ser un gasto extraordinario.
La ONG Save The Children publicó un estudio donde se calculaban los gastos mensuales desglosados que suponía tener un hijo en 2022, así como la comparación con los datos obtenidos en 2018. Debemos tener en cuenta que estamos en un contexto de inflación, por lo que estos gastos podrían seguir aumentando.
2022 (€) | 2018 (€) | |
Alimentación | 117 | 104 |
Higiene | 24 | 22 |
Ropa y calzado | 53 | 47 |
Educación | 88 | 80 |
Ocio y juguetes | 35 | 28 |
Sanidad | 4 | 4 |
Muebles y enseres | 13 | 10 |
Vivienda | 84 | 73 |
Gastos corrientes de la vivienda | 26 | 17 |
Transporte | 15 | 14 |
Conciliación | 116 | 110 |
Gastos extraordinarios | 95 | 77 |
Total | 672 | 587 |
Esta diferencia de 85 euros supone que los gastos relativos a mantener un hijo han incrementado un 14% en los últimos 4 años.
Al igual que la vivienda o el coste de vida en general, tener un hijo puede variar ligeramente dependiendo de la zona del país en la que vivas. Las comunidades autónomas más caras son Cataluña y Madrid, con casi 200 euros mensuales de diferencia. Cataluña lidera como la comunidad donde estos gastos son más elevados, con una cifra que alcanza los 819€ mensuales, muy seguido por Madrid y sus 814€. En Andalucía esta cifra ronda los 641€ por mes, mientras que otras comunidades donde la vivienda es más cara como es el País Vasco, el coste de criar a un hijo está en los 769€ por mes.
Administrar nuestras finanzas y gestionar los gastos asociados a la crianza de un hijo puede resultar todo un reto, pero a través de una adecuada planificación y un presupuesto meticuloso, se puede conseguir de manera eficiente. Aquí te presentamos algunos consejos que te serán de utilidad:
Criar y mantener un hijo en España es una experiencia incomparable, llena de amor y alegría, pero también con desafíos financieros que requieren una planificación cuidadosa. Los gastos asociados a la paternidad, desde la alimentación hasta la educación, son una realidad que debemos enfrentar con responsabilidad. La tabla de coste proporcionada nos ofrece una visión clara de las cifras estimadas, y es fundamental recordar que estos gastos pueden variar según el sitio donde vivamos y las preferencias personales a la hora de criar a nuestros hijos.
A medida que los precios aumentan y las necesidades de nuestros hijos cambian con el tiempo, es esencial mantener un presupuesto sólido y estar al tanto de las ventajas fiscales y las opciones de ahorro disponibles. La inversión en el bienestar y el futuro de nuestros hijos es invaluable, y con una planificación adecuada, podemos garantizar que tengan las mejores oportunidades para crecer y prosperar.
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