Crowd equity: qué es y cómo funciona

La innovación tecnológica está transformando la forma en que se financian las empresas. Cada vez son más los emprendedores y pymes que recurren a fórmulas alternativas para obtener capital y a su vez más los inversores que buscan nuevas oportunidades para rentabilizar sus ahorros. Una de las más populares es el crowd equity o crowdequity, una modalidad de inversión colectiva que gana protagonismo en el ecosistema emprendedor.

Gracias a esta modalidad, cualquier persona puede convertirse en socio de una startup o pyme con solo una pequeña aportación, compartiendo tanto el riesgo como las oportunidades de crecimiento.

¿Qué es el crowdequity?

El crowdequity es una forma de financiación participativa que consiste en que muchas personas aportan capital a una empresa o proyecto a cambio de recibir acciones o participaciones en esa compañía. En lugar de un préstamo que hay que devolver, el inversor se convierte en socio y participa en los beneficios o pérdidas según el resultado del negocio.

Por eso, cuando hablamos de qué es el crowd equity, podemos resumirlo como una fórmula que democratiza la inversión en startups y pymes con potencial, acercando a pequeños ahorradores oportunidades que antes estaban reservadas a grandes inversores.

Crowd equity y crowdfunding: diferencias

El crowd equity forma parte del paraguas del crowdfunding, pero no es lo mismo que otras modalidades como el crowdlending.

• Crowdlending: funciona como un préstamo entre particulares o empresas. El dinero se devuelve en cuotas periódicas más intereses, como en un banco.
• Crowdequity: no hay devolución de dinero, sino que el inversor adquiere participaciones en la empresa y gana si esta crece o reparte dividendos.
  

En otras palabras: el crowdlending es crédito, mientras que el crowdequity es capital social.

El crowd equity permite a cualquier persona invertir en startups o pymes a cambio de participaciones, democratizando el acceso a la inversión.

Cómo funciona el crowd equity

El funcionamiento del crowd equity es bastante sencillo, aunque detrás hay un proceso estructurado que garantiza transparencia tanto para las empresas como para los inversores. Estas son las fases habituales:

1. Publicación del proyecto
   La empresa (generalmente una startup o pyme en expansión) presenta su propuesta en una plataforma de crowdequity autorizada. Incluye información clave: modelo de negocio, proyecciones de crecimiento, equipo directivo y necesidades de financiación.
   
2. Registro del inversor
   Los interesados deben registrarse en la plataforma y, una vez validados, tienen acceso a la documentación completa del proyecto. Esto les permite analizar con detalle la situación financiera, el sector y el potencial de la empresa antes de invertir.
   
3. Aportación de capital
   Cada inversor elige cuánto dinero quiere destinar. Una de las ventajas del crowdequity es que no hace falta disponer de grandes cantidades: se puede participar con aportaciones pequeñas que, sumadas a las de otros inversores, forman una ronda de financiación significativa.
   
4. Cierre de la ronda
   Si la empresa alcanza el objetivo de financiación dentro del plazo establecido, la ronda se cierra con éxito. En ese momento, los participantes pasan a ser socios de la empresa en la proporción correspondiente a su inversión.
   
5. Retorno de la inversión
   A partir de ahí, los inversores pueden beneficiarse de diferentes formas: mediante el reparto de dividendos si la empresa genera beneficios, o a través de la revalorización de sus participaciones en caso de venta futura.
   

En España estas inversiones cuentan con deducciones fiscales de hasta el 30 % en el IRPF, además de estar reguladas por la Comisión Nacional de Mercado de Valores.

Ventajas del crowdequity

El crowdequity aporta beneficios tanto para quienes buscan financiación como para quienes invierten:

Para emprendedores y pymes

• Acceso a capital alternativo: permite obtener fondos sin depender únicamente de la banca tradicional o de grandes inversores.
  
• Sin devolución de intereses: no se trata de un préstamo, por lo que no hay que afrontar cuotas periódicas.
  
• Comunidad comprometida: al contar con muchos inversores, la empresa gana visibilidad y crea una red de personas que creen en su proyecto y pueden convertirse en embajadores de la marca.

Para inversores

• Oportunidad de diversificación: se puede invertir en startups o pymes con gran potencial sin necesidad de grandes cantidades.
  
• Incentivos fiscales: en España, la inversión en empresas de nueva creación permite deducciones en el IRPF de hasta un 30 %.
  
• Marco regulado: las plataformas de crowdequity están supervisadas por la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), lo que aporta seguridad y transparencia.

Riesgos del crowdequity

Como toda inversión, el crowdequity también implica riesgos que conviene tener presentes:

• Alta incertidumbre: muchas startups no logran consolidarse y pueden fracasar en los primeros años.
  
• Falta de liquidez: las participaciones adquiridas no son fáciles de vender en cualquier momento, ya que dependen de rondas posteriores o de la venta de la empresa.
  
• Rentabilidad no garantizada: los beneficios dependen directamente de la evolución del negocio. Si la empresa crece, los inversores ganan; si no, existe riesgo de perder la inversión.
  

Ejemplo práctico de crowd equity

Imagina que una startup tecnológica necesita 100.000 € para lanzar su nuevo producto y publica la ronda en una plataforma de crowdequity.

• La empresa está valorada en 1.000.000 € antes de la inversión.
• Al abrir la ronda de 100.000 €, los inversores que participen recibirán en conjunto el 10 % del capital de la compañía (100.000 € / 1.000.000 €).
  

Si un inversor aporta 500 €:

• Su participación será proporcional: 0,05 % de la empresa.
• Si en unos años la startup se vende por 5 millones de euros, ese 0,05 % equivaldría a 2.500 €.
• Además, si la empresa reparte dividendos anuales, el inversor también recibiría la parte que le corresponde según su participación.

Conclusión

El crowd equity o crowdequity es una alternativa innovadora de inversión que permite a los pequeños inversores convertirse en socios de startups y pymes con gran potencial. A diferencia de otros tipos de crowdfunding, aquí no hay devolución de un préstamo, sino participación en los beneficios de la empresa.

Saber qué es el crowdequity y cómo funciona ayuda a entender por qué se ha convertido en una de las fórmulas más atractivas para quienes quieren diversificar su cartera y apoyar el crecimiento de nuevos proyectos. Eso sí, siempre conviene analizar bien cada propuesta y valorar tanto las oportunidades como los riesgos antes de invertir.