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Aunque sean temas relativamente tabú y a veces nos cueste pensar en ello, en la vida pueden suceder imprevistos que nos lleven a situaciones delicadas para las que es mejor estar preparado. Seguro que te lo has planteado más de una vez, pero contratar un seguro de vida es invertir en tranquilidad, en la seguridad de nuestros familiares e incluso de nosotros mismos.
Contratando un seguro de vida, nos aseguramos un cierto nivel de vida pase lo que pase, aunque también puede ser una opción para complementar tu pensión de jubilación. En este post, te contamos qué es y las razones por las que es buena idea contratar un seguro de vida.
¿Qué es un seguro de vida?
Antes de empezar, veamos cómo funciona exactamente este tipo de seguro. Un seguro de vida es una póliza que garantiza la seguridad económica del asegurado, así como de su familia en caso de fallecimiento o de accidente que no le permita seguir trabajando. En estos casos, el seguro indemniza a los beneficiarios del seguro y/o al afectado con una cantidad económica.
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En definitiva, contratar un seguro de vida es garantizar un rescate económico para cubrir las necesidades que deriven de una situación imprevista. Veamos cuatro razones que te pueden ayudar a terminar de decidirte si estás pensando en contratarlo.
Estarás preparado ante cualquier imprevisto
Tanto si trabajas en un sector de riesgo, como la construcción, la seguridad del Estado, la industria química o la de transportes, como en uno que aparentemente no acarree peligros, un seguro de vida te permite estar preparado ante un accidente, enfermedad o complicación. Y es que estas situaciones se pueden dar tanto en el ámbito laboral como fuera de él.
Además, contratar un seguro de vida te puede proporcionar asistencia sanitaria y otros cuidados para afrontar una enfermedad o invalidez. Esto dependerá de lo que tengas contratado en tu póliza.
El futuro de tus familiares
En algunos casos, una sola persona es el principal o único sustento económico de una familia completa. Si contratas un seguro de vida, podrás tener la tranquilidad en caso de que ocurra un accidente o enfermedad que te incapacite. De esta manera, tus seres queridos podrán mantener un cierto nivel de vida y no tendrán que pagar gastos médicos o de rehabilitación inesperados. En una situación de vulnerabilidad como esta, el soporte económico puede ser una fuente de tranquilidad y calma que marque la diferencia.
Tributación de los seguros de vida
También es importante conocer cómo tributan los seguros de vida en España.
En caso de fallecimiento, el/los beneficiarios del seguro deben abonar el correspondiente impuesto de sucesiones y donaciones. En este caso, los beneficiarios se pueden beneficiar de ciertas deducciones a la hora de tributar que corresponden al capital resultante de un seguro de vida.
En caso de invalidez, normalmente asegurado y beneficiario son la misma persona, por lo que se tributa al IRPF. Además, se considera rendimiento del capital mobiliario toda la rentabilidad generada del seguro.
Además, los autónomos pueden incluir sus aportaciones a un seguro de vida en España en la declaración de la renta hasta un máximo de 500 euros si el asegurado y el beneficiario son la misma persona.
Se adaptan a tus necesidades
¿Qué puede cubrir un seguro de vida? Un seguro de vida en España puede tener distintas coberturas, y es que cada situación y persona tiene circunstancias muy distintas. Además de servir para saldar deudas, como préstamos, hipotecas o gastos derivados del accidente.
Un seguro de vida cubre principalmente el fallecimiento del asegurado, sea por la causa que sea, pero también puede cubrir una enfermedad grave, por incapacidad permanente o absoluta o por accidente de tráfico. En estos últimos casos, pueden ser una opción ideal para compensar la pensión pública de incapacidad.
¿Cuál es el precio de un seguro de vida?
Y la pregunta del millón, ¿cuánto nos puede costar? Un seguro de vida en España puede costarte alrededor de los 200€ y los 600€ al año. Lo normal es que el importe total del seguro cubra de tres a cinco años de salario de la persona asegurada.
Por supuesto el precio de un seguro de vida varía mucho en función de la edad, las coberturas contratadas o la profesión. Factores como el estado de salud, enfermedades crónicas o hábitos como fumar pueden encarecer y mucho el precio de un seguro de vida.
Contratar un seguro de vida: conclusiones
En resumen, el seguro de vida es un instrumento muy útil para asegurar tranquilidad y respaldo económico. No obstante, es necesario comparar distintos seguros y sus diferentes coberturas, pedir consejo, rastrear precios. Y es que no todos los seguros de vida son iguales y es esencial elegir uno a medida que se adapte a nuestras necesidades.
Como hemos visto, en algunos casos, contratar un seguro de vida puede reportarnos beneficios a la hora de hacer la declaración anual de la renta, y lo que es más importante, es una garantía para el asegurado y sus seres queridos de que no pasarán aprietos económicos si algo inesperado ocurre.
